*escrito por: Sergio Rodríguez Avila para MedioLleno
El pasado martes 16 de febrero El Diario de Hoy me publicó una columna titulada “La izquierda hipócrita.” En esa columna, tal como el título lo sugiere, comenté algunos aspectos de hipocresía que rodea a las personas de izquierda en nuestro país y en Latino América. Discutí la hipocresía de la izquierda, especialmente de la izquierda ortodoxa y presidentes miembros del ALBA, que viven abundantes riquezas mientras pregonan ayudar a los pobres.
Considero importante que también se discuta elementos de hipocresía que rodean a muchas personas de derecha en El Salvador y en Latino América que también dicen ayudar al pueblo cuando en realidad hacen completamente lo contrario. Aprovechando mi posición de joven donde no tengo nada que perder, me atrevo a resaltar y apuntar ocasiones, grupos y personas de derecha que son verdaderamente hipócritas.
El ex Presidente de Nicaragua, Arnoldo Alemán. Presidente derechista de Nicaragua no sólo robó millones de dólares, sino que entregó en bandeja de plata el poder al Presidente Ortega con tal de lograr sus objetivos personales de poder y protección jurídica a su persona. Incluso, Alemán llegó a apoyar una reforma constitucional para hacer posible que Daniel Ortega llegara al poder.
La razón por la cual muchos gobiernos de izquierda en Latino América llegaron al poder no fue necesariamente porque los diferentes pueblos fueran de izquierda, sino por administraciones de derecha corruptas que sólo buscaban sus fines personales. Es importante reconocer el caso de Ecuador, donde el tiempo promedio que duraba un presidente anterior a Rafael Correa era menos de dos años.
Fijando de nuevo la brújula en El Salvador, discutamos un poco del nuevo partido, GANA. Si existiera un premio llamado Presidente Arnoldo Alemán, se lo ganara por unanimidad la Gran Alianza por la Unidad Nacional. Es increíble lo que el egoísmo, la hipocresía y el poder le ha hecho a estas personas, que con tal de encubrir una mala administración han hecho lo posible por entregarle el poder al FMLN.
La hipocresía es un tipo de traición, en el caso de los políticos, es una traición a la patria. Los diputados de GANA, aunque no siento adecuado gastar mucha tinta analizándolo de nuevo, han logrado un tipo de fraude electoral. Ellos, con el apoyo del ex Presidente Saca, han verdaderamente logrado ser los miembros de derecha en El Salvador más hipócritas en lo que va del siglo XXI.
El Partido de Conciliación Nacional, PCN. Dirige la Corte de Cuentas y la Asamblea Legislativa, Su hipocresía es tal que lideran las dos instituciones con menos credibilidad y popularidad en el país. La Corte de Cuentas tiene tan poca credibilidad que cuando dice que alguien no es corrupto, es porque lo es (en referencia al finiquito otorgado al ex Presidente Saca). El Presidente de la Asamblea Legislativa, Ciro Cruz Zepeda, mis respetos como ha logrado tanto poder político. Sigo esperando a ver cuándo va a usar su influencia dentro de la Asamblea Legislativa para verdaderamente llevar una agenda honrada que evite la posibilidad de futuros gobiernos totalitaristas comunistas en El Salvador. Dudo que suceda, ya que la hipocresía del partido que maneja, con miembros como el ex presidente Francisco Merino que le disparó a un policía mientras estaba borracho, vayan a ser un verdadero ejemplo de congruencia.
Sin embargo, en nuestro país como en todas partes del mundo, sean de la ideología que sean nuestros políticos, tal como todos los seres humanos, siempre tendremos una dosis de hipocresía. Todos somos hipócritas de cierta manera, pero la diferencia con nuestros políticos, es que ellos son los que dirigen el futuro de nuestro país. Personalmente, creo que la actual generación de políticos en nuestro país debe renovarse y dirigirse a un cambio generacional. No cambio de personal, un cambio que de un borrón y cuenta nueva dándoles espacios a todos los salvadoreños que quieren trabajar congruentemente por nuestro país.
