El grupo parlamentario del FMLN que ayudó a introducir la pieza de correspondencia, hace votos para que todas las fracciones legislativas apoyen la solicitud y reconocer así el legado del mártir nacional
La iglesia Católica y diversas organizaciones sociales pretenden que una de las máxima figuras religiosas que perdió su vida “por causa de los pobres” sea recordado en el país dedicándole un día nacional cada año y hasta siempre.
El párroco de la iglesia Cristo Redentor, Monseñor Ricardo Urioste, presentó este martes una solicitud a la Asamblea Legislativa para que el próximo 24 de marzo sea declarado por decreto el “día nacional” de Monseñor Óscar Arnulfo Romero.
Romero fue asesinado el 24 de marzo de 1980 en la capilla de la Divina Providencia en San Salvador, mientras oficiaba una misa en memoria de uno de sus muchos amigos, Pinto.
Del crimen fue responsabilizado el fundador del partido Alianza Republicana Nacionalista (ARENA), mayor Roberto d`Aubuisson, entre otros, según consta en el informe de la Comisión de la Verdad nombrada por la ONU para indagar crímenes atribuidos tanto a la Fuerza Armada como al FMLN, en el marco de la guerra que vivió El Salvador entre 1980 y 1992.
La solicitud fue recibida por diputados del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), entre quienes figuraron el coordinador nacional del partido de izquierda, Medardo González, y el vocero del mismo partido, Sigfrido Reyes, quienes luego la presentaron como pieza de correspondencia.
Urioste recordó uno de los últimos escritos de Romero plasmados en sus “ejercicios espirituales” previo a su martirio: “tengo miedo a la violencia en mi persona, pero voy a sentir muy cerca a Dios de mí como lo sintieron los mártires”.
Pero otra de las motivaciones para proponer el día nacional es la entrega de Romero a Dios y a su pueblo, el legado de éste “hombre de Dios” como se lo conoce al mártir, podrá descubrirse en los pobres, en los obreros, los campesinos e incluso en los jóvenes que no lo conocieron físicamente, pero que sí saben de su aporte a la justicia desde la luz del Evangelio.
Para el líder religioso, las organizaciones sociales y los campesinos de Chalatenengo que han firmado la solicitud, el deseo está bien justificado, ya que cifran la petición en un reconocimiento a la entrega hacia los pobres hacia los cuales sentía amor, gozo en ellos y aprecio que lo llevó a defenderlos vehementemente y lo cual lo llevó a su muerte.
El deseo no es único de su la iglesia católica, a la petición se han sumado también la comunidad judía residente en el país, las iglesias Anglicana, Luterana, Bautista Enmanuel y demás iglesias históricas representadas en El Salvador.
Mientras tanto, el diputado Sigfrido Reyes, dijo que se espera que todas las fracciones políticas representadas en la Asamblea Legislativa apoyen la pieza en aras de reconocer públicamente el legado de Monseñor Óscar Arnulfo Romero.
Aludió a las expresiones de Monseñor Urioste, en el sentido de señalar que la figura de Monseñor Romero, a quien consideran el santo de El Salvador, tiene un amplio reconocimiento internacional.
La Abadía de Westminster o Iglesia colegiata de San Pedro de Westminster (en inglés:Westminster Abbey) es una iglesia gótica del tamaño de una catedral. Es el lugar tradicional para las coronaciones y entierros de los monarcas ingleses. Está localizada en Westminster, Londres, al lado del Palacio de Westminster.
Así ha quedado registrado en ese lugar como uno de los diez mártires del siglo XX representado en las estatuas de dicha abadía, desde el 9 de junio de 1998, cuando la Reyna Isabel develó la estatua de Monseñor Romero.
Monseñor Urioste recordó que en tal sentido el mártir salvadoreño es un personaje universal. De hecho en América Latina se lo reconoce como “el santo de América”.
Una de las organizaciones que apoyan la solicitud es la Concertación Democrática Nacional, cuyo presidente José Domingo Méndez, pidió a los diputados que atiendan este clamor para hacer posible este día nacional en memoria del hombre que tuvo una “opción preferencial por los pobres”.
Recientemente el Arzobispo de San Salvador, Monseñor José Luis Escobar Alas, pidió que no se haga “nada en contra ni nada a favor”, que pueda incidir en la canonización de Monseñor Romero, pero Urioste consideró que esta petición no interfiere con ese deseo del máximo representante de la iglesia Católica del país.
Mientras tanto, al hablar del proceso de canonización, Urioste dijo que el deseo de los salvadoreños es que ese proceso finalice lo más pronto posible, aunque recordó que las últimas canonizaciones son las otorgadas a mártires de los años 1600.
*por Gregorio Morán para ContraPunto