En la campaña electoral, el candidato a presidente por el FMLN, Mauricio Funes, aparecía en un spot de televisión con Obama a la derecha y Lula a la izquierda, afirmando que ambos eran sus referentes políticos. Esas imágenes que graficaban la posición política del candidato, ahora se ven plasmadas en la realidad, como las prioridades de las relaciones internacionales del Presidente de la República de El Salvador.
*Juan Ramón Medrano (catedrático) para LPG
La primera reunión del presidente Funes fue con el presidente Lula en Brasil y recientemente este realizó en forma recíproca una visita a nuestro país; y es Funes, el primer presidente centroamericano que recibe el presidente Obama en Estados Unidos. Ambas reuniones han sido positivas y prometedoras; pues ambos países pueden ayudarnos a combatir los dos graves problemas que sufre El Salvador: el combate a la delincuencia y crimen organizado y el combate a la pobreza y la crisis económica.
En la visita a Washington, Funes fue recibido por Obama en forma muy cordial. Y en términos generales, a pesar de la enorme distancia entre la primera potencia mundial y nuestro país, escuchamos al mandatario norteamericano hablar de alianza estratégica y de relaciones de respeto y entre iguales.
Pero además, consciente de la necesidad de ver a Centroamérica como un todo, y que en este aspecto existe una gran oportunidad de liderazgo regional para el presidente Funes, el presidente Obama dijo: “Quiero felicitar al presidente Funes por su liderazgo, por la sabiduría y el pragmatismo que ha demostrado, por la forma en que ha enfrentado casos como la crisis en Honduras... y como ahora busca su reincorporación en Centroamérica”.
En términos generales, el presidente Mauricio Funes y el canciller Hugo Martínez han manejado bien las relaciones internacionales, no solamente en términos prácticos o pragmáticos, sino en términos realistas. Conscientes de que el futuro económico y político de El Salvador dependen en gran medida de los dos millones de salvadoreños que mandan remesas desde Estados Unidos, y también, que debemos de consolidar las relaciones políticas con este país que es nuestro socio mayoritario, independientemente de posiciones ideológicas. Pero también estrechan relaciones con Brasil, y han reabierto relaciones diplomáticas con el gobierno cubano. Y en esa misma línea realista, tampoco podemos negar que Honduras es otro de los socios mayoritarios de El Salvador, particularmente en materia económica y comercial. Y que nuestras oportunidades en las relaciones políticas y comerciales con el resto del mundo crecen en la medida que conformamos la patria grande centroamericana que soñaron nuestros próceres.
Pero a escala nacional, Funes se encuentra entre ARENA y el FMLN; una realidad más complicada: El Frente, buscando diferenciarse del Ejecutivo, pensando en no cargar con el desgaste natural que sufre el partido de gobierno; y la derecha, asumiendo un papel de oposición creyendo que pueden recuperar el Ejecutivo, negándose a cooperar con el gobierno, como lo hizo el Frente cuando era oposición. No obstante, el Frente necesita por razones político electorales apoyar a Funes para que haga un buen gobierno; y ARENA, asumir un papel político más responsable, si quiere recuperar la credibilidad de sus votantes. Y en este panorama, CD, GANA, PDC y PCN están votando responsablemente en la asamblea.
En vez de ver el vaso medio lleno o medio vacío, en vez de solo criticar, debemos ayudar a la gobernabilidad y en el combate a la delincuencia, la pobreza y demás problemas nacionales.
